Reseña: Caraval

Libro: ¿1/2?

Autor: Stephanie Garber

Editorial: Planeta

Año de publicación: 2017

Número de páginas: 424

Precio aproximado: 17.90€

Género: Fantasía juvenil

Tapa: tapa dura con sobrecubierta

Sinopsis: Recuerda, sólo es un juego… Scarlett Dragna nunca ha abandonado la pequeña isla en la que ella y su hermana Tella viven bajo la vigilancia de su estricto y cruel padre. Desde hace años Scar sueña con asistir a la celebración anual de Caraval, unos legendarios juegos que duran una semana y en los que la audiencia participa para ganar el Gran Premio. Caraval es magia, misterio y aventura. Y para Scarlett y su hermana representa la libertad y poder huir de su padre. Ahora que está a punto de casarse con un hombre al que nunca ha visto, Scar cree que su sueño nunca se cumplirá. Pero justo dos semanas antes de la boda recibe las tan ansiadas invitaciones a los juegos. Sin embargo, una vez allí nada sale como espera: Legend, el Maestro de Caraval, secuestra a Tella y Scarlett se verá obligada a entrar en un peligroso juego de amor, sueños, medias verdades y magia en el que nada es lo que parece. Real o no, sólo dispone de cinco noches para descifrar todas las pistas que conducen hacia su hermana, o ésta desaparecerá para siempre…

Scarlett y Donatella Dragna llevan viviendo toda su vida bajo amenazas y golpes a manos de su padre, el gobernador. Y más desde que su madre, de la noche a la mañana, decidió abandonarlas. Desde ese momento Scarlett se propuso cuidar y proteger a su hermana con su vida. Literalmente. Y es que el gobernador tiene una forma muy curiosa de castigar a sus hijas: si una hace algo mal, la paliza se la lleva la otra.

Ahora Scarlett es adulta y está prometida con un conde (del que no sabe absolutamente nada) que puede ayudarles a escapar de allí. Con su boda encontrará la salvación. Sin embargo, todo se complica cuando recibe una carta del maestro Legend de Caraval, aquel misterioso hombre al que le estuvo mandando cartas durante toda su infancia para que fuesen a Trisda, una de las Islas Conquistadas con su espectáculo. En ella le felicita por su compromiso y le adjunta tres invitaciones para acudir a Caraval bien como simple observadora o si quiere y se atreve, para jugar. En cuanto se lo cuenta a Tella, la pequeña de las hermanas se vuelve loca de contenta y planifica el viaje que resulta ser más fácil de lo que ella hubiera imaginado: Su nuevo amante, un marinero llamado Julián se ofrece a llevarlas hasta allí con la condición de que le regalen esa tercera entrada.

¡Madre mía! Este libro es una locura. Lo empecé con mucho miedo, para que os voy a mentir. Había visto bastantes más críticas negativas que positivas y no las tenía todas conmigo. Pero la verdad es que Caraval ha sido toda una sorpresa.

Lo primero en lo que me fijé, como hago siempre inconscientemente, es en la forma de escribir de la autora. En este caso me gustaron tanto su pluma como la traducción. Nada que decir al respecto. 

El libro está dividido en cinco partes diferencias (si no me equivoco) y narrado desde el punto de vista de Scarlett, un gran acierto por parte de Stephanie, sin duda, porque de este modo el lector, al igual la protagonista, formamos parte del juego. No sabemos qué es real y qué no, en quién confiar, y sin darnos cuenta nos vemos dentro de Caraval intentando encontrar la pistas que nos lleven hasta Tella y el deseo que concede Legend como premio al ganador.

Sin embargo, al ver ese mundo desde los ojos de Scarlet hay un detalle que no me ha gustado: Las descripciones. Dentro de Caraval todo es posible, existe la magia. Y creo que la autora no ha sabido explicar al lector todo lo que Scarlett veía allí. Muchas veces era confuso y muy difícil de imaginar.

De los personajes principales podemos destacar a cuatro:
Scarlett Dragna es la hermana mayor que ha tenido que crecer de golpe. Su padre la maltrata a ella y a su hermana, y su madre desapareció hace años. Para ella su prioridad es sobrevivir y que Donatella también lo haga. Es muy sensata, piensa siempre en las consecuencias antes de actuar. Antes creía en la magia y tenía ilusión pero hace años que la perdió. Se ha vuelto una persona seria y desconfiada.

Dontella o Tella Dragna es todo lo contrario a Scarlett. Ella es impulsiva, imprudente, alocada, las consecuencias no le importan. Ella tiene muy claro que se va a largar de las Islas Conquistadas más pronto que tarde y mientras tanto intenta no tenerle miedo a su padre, aunque a veces le resulta muy difícil.

Julián es un joven marinero que ha atracado en Trisda. Aunque acaba de conocerla, está dispuesto a pasar un buen rato con Tella en la bodega de la hacienda, y es así como le conocemos. Es un chico astuto e inteligente que siempre asegura un pie antes de mover el otro. Realmente no conocemos del todo a Julián hasta el final de la novela porque la magia de Caraval también nos afecta a nosotros. Lo que podemos ver de él en un primer momento es que va por la vida con una tranquilidad pasmosa, bromea acerca de cualquier cosa, parece ocultar muchos secretos y todo él es un misterio andante.

Y por último, Legend, el maestro de Caraval. Nadie lo ha visto nunca, dicen que cambia de aspecto de una vez a otra y que si lo ves nunca sabrás que es él. Lo único en lo que coincide todo el mundo es que es un chico que siempre se mantiene joven y que destaca por su belleza y sus sombreros de copas. Hace años se le dio a elegir entre dos cosas muy importantes para él, pero le pudo la ambición convirtiéndose, sin quererlo, en el papel que interpreta dentro de Caraval.

Había leído por ahí en muchas reseñas que el romance es precipitado y poco creíble. A mí no me lo ha parecido. No es lo mismo pasar una semana en tu casa, en tu ciudad y conocer a alguien, que estar en un sitio misterioso donde esa persona es tu único apoyo y la única en quién puedes confiar. Las cosas se sienten de forma mucho más intensa. Por eso yo sí me he creído la relación que nos plantea la autora. Además, empieza muy poco a poco. Primero se llevan bastante mal, luego se vuelven confidentes, más tarde amigos, y poco a poco van surgiendo los sentimientos.

Aunque este libro me ha gustado mucho, tengo que destacar algún que otro fallo, como por ejemplo el comportamiento de Scarlett dentro del concurso. Para ella, al igual que para nosotros, es su primera vez en Caraval, un mundo totalmente diferente a lo que está acostumbrada. Sin embargo, en todo momento sabía lo que tenía que hacer, a dónde tenía que ir y con quién tenía que hablar. Sabe casi de inmediato dónde encontrar todas las pistas y la mayoría de las veces acierta a la primera. Eso no es creíble y me ha molestado bastante encontrar este comportamiento en casi todos los capítulos. Ella es una chica lista, pero no tanto.

Otra cosa que no me ha terminado de convencer es el principio. En mi opinión es muy lento. Durante las primeras cuarenta o cincuenta páginas ocurren cosas, sí, pero es como si no hubiera pasado nada. Hasta que no llegamos a la parte de Primera noche en Caraval es bastante introductorio.

Como he comentado antes, Caraval también es un juego para nosotros. Nada es lo que parece ser. Toda la trama se va liando durante la historia hasta que tú, como lector, crees haber entendido lo que pasa. Pues te equivocas. Las últimas 50 páginas hacen que te explote la cabeza y que te des cuenta de lo alejado de la realidad que te encontrabas. Creo que todo el mundo debería leer este libro por ese final tan espectacular.

Este es el primer tomo de creo que una bilogía y, aunque no estoy deseando hacerme con el segundo, creo que sí lo leeré cuando se publique (si se publica) en España. Es cierto que Caraval no tiene un final cerrado, pero únicamente deja una trama abierta que te hace ver por dónde irán los tiros en su continuación.

En resumen: Caraval es una historia de misterio, aventuras, fantasías y amor donde nada es lo que parece. El propio lector, a través de los ojos de la protagonista, se ve envuelto por la magia de Caraval y forma parte del concurso sin darse cuenta. Las traiciones y las mentiras también son un ingrediente importante para que este cóctel se convierta en un libro adictivo con un punto (bastante grande) de locura.