Autor: Alice Kellen
Editorial: Titania (bajo el sello fresh)
Año de publicación: 2018
Número de páginas: 378
Precio aproximado: 16€
Género: New Adult
Tapa: tapa blanda con solapas
Sinopsis: Autumn ha crecido en hogares de acogida y su pasado es como un lienzo en blanco. Sabe que es importante defender sus ideas, vivir al día y no aferrarse a las cosas, pero siente debilidad por «la casa azul», esa preciosa propiedad en la que años atrás vivía una familia que ella anhelaba desde lejos y que, ahora, está a punto de convertirse en un montón de escombros por culpa de la inmobiliaria de Jason Brown, un hombre al que no le gusta ceder el control ni salirse del camino correcto, a pesar de que su mirada clara esté llena de contención. Y, aunque Autumn pretendía evitarlo, Jason termina siendo un cosquilleo en la tripa, un beso robado, una atracción imprevista que ninguno de los dos puede frenar durante la noche de tormenta que cambiará y unirá sus vidas para siempre. Porque, a veces, los polos opuestos rozan. Y prende la chispa del amor y la locura.
Autumn ha pasado toda su vida sin un hogar, mudándose de una casa a otra y sin encontrar su sitio. El único trocito del mundo en el que ha sido feliz es la casa azul, hogar de una familia a la que ella espiaba de pequeña durante horas, soñando con tener lo que ellos tenían. Autumn sabía que jamás le sonreiría así la suerte. O al menos así lo fue hasta los 15 años, cuando conoció a la que iba a ser su verdadera familia. Trabaja en una tienda de antigüedades y su punto débil son las causas perdidas. Por eso, cuando se entera que una inmobiliaria quiere tirar abajo la casa azul, su casa azul, tiene que impedirlo. Y es así como conoce a Jason Brown. No hay dos personas en el mundo más diferentes que ellos. Pero, a pesar de sus diferencias, tienen algo en común: la atracción. Gracias a eso, a una noche de tormenta, a unas llaves perdidas, y a un ansiado silencio, que sus vidas acabarán uniéndose para siempre en esa casa mágica.
Este es el segundo libro de Alice Kellen que leo este año, pero hay una diferencia enorme entre el primero y 13 locuras que regalarte. Con esta historia he puesto el punto y final a la serie #VolverATi que me ha acompañado durante dos largos años. Como he dicho muchas veces, yo no he sentido estos libros como el resto del mundo (al menos los dos primeros), pero gracias a ellos he descubierto a una maravillosa autora con una forma de escribir que enamora.
Esta novela es la que más me ha gustado de los tres libros.
Como en los dos tomos anteriores, la narración aquí también empieza en pasado, contándonos la infancia de Autumn a lo largo de los años hasta llegar al presente. Estos capítulos me han conmovido muchísimo, más que el pasado de Rachel o el de Harriet. Se puede ver el mundo cruel en el que vivimos desde la inocencia de una niña que, poco a poco, se va dando cuenta de cómo son las cosas, teniendo que madurar a toda prisa. A partir de ahí, ya en el año 2018 que es cuando transcurre la historia, podemos leer capítulos desde el punto de vista de ambos personajes, pero no llega a ser una narración compartida, sino que más bien un narrador externo nos habla de Autumn y Jason según es oportuno para la trama.
Si quería leer este libro en un principio era por él, por Jason, el chico controlador y cuadriculado al que no le gusta dejar nada al azar. Pero el joven que he conocido es un poco diferente a la idea que me había creado en mi cabeza. Os voy a hablar un poco de él:
Jason es el más formal y sensato del grupo de amigos que forma junto a Mike, Luke y Rachel. Desde pequeño ha sido una persona responsable y centrada, pero eso con los años ha ido aumentando. Trabaja en una inmobiliaria, como pudimos ver en 33 razones para volver a verte, y es muy profesional. Con sus sentimientos no es que no le guste dejarse llevar, es que directamente le es totalmente imposible. Jamás se ha enamorado, pero no ha sido por falta de ganas, sino porque, por mal que suene, se acaba cansando de la chica en cuestión unos pocos meses después de empezar a relación. Cree que esa parte dentro de él está rota y que jamás conseguirá amar a una chica como quiere a su familia o a sus amigos, que lo son todo para él; forman un círculo cerrado herméticamente en el que quedan todos sus sentimientos y emociones.
Jason es el más formal y sensato del grupo de amigos que forma junto a Mike, Luke y Rachel. Desde pequeño ha sido una persona responsable y centrada, pero eso con los años ha ido aumentando. Trabaja en una inmobiliaria, como pudimos ver en 33 razones para volver a verte, y es muy profesional. Con sus sentimientos no es que no le guste dejarse llevar, es que directamente le es totalmente imposible. Jamás se ha enamorado, pero no ha sido por falta de ganas, sino porque, por mal que suene, se acaba cansando de la chica en cuestión unos pocos meses después de empezar a relación. Cree que esa parte dentro de él está rota y que jamás conseguirá amar a una chica como quiere a su familia o a sus amigos, que lo son todo para él; forman un círculo cerrado herméticamente en el que quedan todos sus sentimientos y emociones.
Autumn es totalmente diferente. Desde muy pequeña ha sido una chica alegre, simpática y parlanchina, pero no por eso es ajena a la realidad; todo lo contrario. Es consciente de que el mundo está mal. Lo aprendió muy pronto y por las malas, y siente la necesidad de ayudar, de poner su granito de arena para cambiar las cosas. Su visión del mundo es diferente a la del resto de personas. Tiene un corazón enorme lleno de tiritas, que no curan las heridas, pero que le permiten seguir adelante. Está acostumbrada a vivir la vida como si fuera su último día y por eso se emociona con los pequeños detalles a los que nadie más les daría importancia, y pocas veces piensa las cosas antes de actuar. Es apasionada, para lo bueno y para lo malo. Le encantan los horóscopos, aunque a veces finja que los lee solo para divertirse, y es Escorpio.
Los personajes secundarios que aparecen en esta última entrega de la serie también me han gustado mucho:
Cómo no, tenemos a Mike y a Rachel, y a Luke y a Harriet. Me he emocionado mucho con algunas de sus apariciones porque, aunque no disfrutase de sus libros al 100%, sí guardo muy buenos recuerdos de algunas escenas en concreto. Y verlos así, a todos juntos, me ha encantado. Eso sí, tienen algunos momentos con Jason que son de ten amigos para esto...
Otros personajes que tienen importancia son Roxie, Hunter y Pablo, los chicos con los que compartió Autumn casa de acogida en su infancia. Me han despertado muchísima ternura porque se nota que la querían muchísimo y los tres hicieron el papel de hermano mayor protector, ya que Autumn era la más pequeña.
La familia de Jason también juega un papel fundamente en la historia: su madre Helga, su padre (que ahora mismo no recuerdo cómo se llama), y los hermanos mellizos Leo y Tristan con los que me he reído muchísimo y que me alegra que hayan aparecido tantas veces.
Y por último, Abigail, Nathaniel, Jimmy y Tom. Los dos primeros son madre e hijo, la familia a la que fue a parar Autumn y con la que se ha quedado. Jimmy es un niño pequeño que Abigail acogió unos años después. Y Tom es el asistente social al que Autumn le debe la vida, puede que literalmente, que también importancia en alguna subtrama.
La relación romántica que aparece en este libro me ha gustado, pero lo hubiera hecho más si hubiese un punto de inflexión en el que los personajes se dan cuenta de sus sentimientos. Me encanta que sea un romance a fuego lento, no os equivoquéis, pero va tan despacio que no se puede distinguir bien el momento en el que pasa de ser atracción y cariño a amor. Es algo que no me ha gustado, sobretodo por parte de Jason que no hacía más que contradecirse. De verdad que esperaba otro tipo de reacción por su parte; en eso he acabado un poco decepcionada. Aunque los momentos a los que hace referencia el título me han parecido muy bonitos y sé que los voy a recordar del mismo modo que guardo recuerdos de la relación de Mike y Rachel y de la de Luke y Harriet.
Lo que sí he echado de menos ha sido que tenga tan poca importancia el motivo por el que Jason y Autumn siguen compartiendo momentos juntos. Hay momentos clave en los que se menciona y se le dedican unos pocos párrafos, pero casi no se habla de ello. No he entendido esa falta de protagonismo a algo tan importante.
El final me ha gustado y emocionado. Ha habido una parte que era obvia desde que leí la sinopsis, pero que me ha gustado igualmente ver cómo se producía, y el resto creo que ha sido un muy buen cierre de este libro y de la serie en general.
En resumen: 13 locuras que regalarte es el libro que más me ha gustado de la serie Volver a ti. He conectado mejor con Autumn que con las protagonistas anteriores, y su historia me ha llegado más. El romance me ha gustado mucho, aunque me esperaba otro tipo de reacciones por parte de Jason dada su personalidad. Pero sobretodo, este libro cuenta con momentos emotivos, cómicos y hasta indignantes, todo ello escrito por Alice Kellen, una autora que consigue transformar los sentimientos en palabras como pocas lo hacen-. Creo que es un buen final para esta serie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Qué opinas tú? ¿Tenemos los mismo gustos?
Por favor, no hagáis spoilers si no avisáis primero. Es algo que fastidia mucho y que es casi imposible de olvidar.
Tampoco hagáis SPAM si no tiene que ver con el tema de la entrada.