¡Hola, chicos!
Como sabéis, a mí me encanta la Navidad y todo lo relacionado con ella, y, además, soy una persona muy detallista. Así que si juntamos las dos cosas tenemos los amigos invisibles. Y si a eso le sumamos mi mayo pasión que es la literatura y la maravillosa gente con la que hablo todos los días a través de los blogs o las redes sociales, casi mejor.
En un principio iba a participar en el que organizaba Andrea, a la que conocí precisamente gracias a un amigo invisible. Pero, lamentablemente, por falta de gente no salió adelante. Me dio mucha pena por ella, por la ilusión que le había puesto a esta iniciativa. Sé lo que es poner todas tus ganas en un proyecto y que al final no se haga por causas ajenas a ti...
Raquel, del blog La pecera de Raquel, una de las pocas chicas que quería participar en la iniciativa navideña de Andrea, debió de pensar algo parecido, porque unos pocos días después publicó una entrada animándose, por primera vez, a organizar un amigo invisible bloggero. Así que no me lo pensé demasiado y me lancé de cabeza.
En esta ocasión, al contrario que el año pasado, no conocía a los demás participantes. No nos seguíamos en el blog ni en redes sociales. Pero eso no me echó para atrás. Y finalmente mi víctima fue Antonio, del blog La cueva de Zeguir. Y la suerte quiso que esa misma persona fuera la que me regalaba a mí.
Ahora voy a pasar a enseñaros lo que me regaló, que me hizo mucha ilusión y que no me esperaba para nada.
Lo primero, el paquete.
Me gustó muchísimo la caja, No se puede apreciar bien pero es de Harry Potter. Está llena de dibujos de los personajes de esta famosa saga. Intenté hacer una foto solo a la caja pero se veía fatal...